|
La
mayoría de los circuitos integrados son pequeños
trozos, o chips, de silicio, de entre 2 y 4 mm2, sobre los que
se fabrican los transistores. La fotolitografía permite
al diseñador crear centenares de miles de transistores
en un solo chip situando de forma adecuada las numerosas regiones
tipo n y p.
Durante
la fabricación, estas regiones son interconectadas mediante
conductores minúsculos, a fin de producir circuitos especializados
complejos. Estos circuitos integrados son llamados monolíticos
por estar fabricados sobre un único cristal de silicio.
Los chips requieren mucho menos espacio y potencia, y su fabricación
es más barata que la de un circuito equivalente compuesto
por transistores individuales.
|