El proyecto de forjados
de dimensiones habituales se rige por la Instrucción EFHE
vigente en la actualidad.
La función especial del forjado unidireccional es recibir
las cargas verticales, transmitirlas a las vigas, por éstas
a los pilares y, por último, a la cimentación.
Además de esta, el forjado cumple otras funciones dentro
de la estructura, entre las que destacan:
- Dar rigidez transversal
a las vigas
- Incrementar su capacidad resistente a flexión y torsión
- Solidarizar los entramados a nivel de cada planta
- Funcionar como grandes vigas horizontales frente a acciones
de viento y/o sismo.
Tipos:
In situ
–
Losas macizas de hormigón
Su inconveniente
fundamental es su elevado peso propio, que en edificios de vivienda
puede superar el 50% de la carga total. Sus ventajas son su sencillez
de armado y la facilidad de encofrado, actualmente en países
fuertemente desarrollados
– Losas aligeradas (nervadas)
Es una evolución
del anterior, en el que mediante el uso de encofrados o de bovedillas
se reduce el peso propio. La capacidad resistente a flexión
del forjado es mucho mayor para momentos positivos que negativos.
Parcialmente prefabricados
–
Forjados con viguetas, bovedillas y hormigón “in
situ”.
– Forjados con semiviguetas, bovedillas y hormigón
“in situ”.
En estos forjados,
hasta el endurecimiento del hormigón vertido, la pieza
prefabricada debe resistir el peso propio del forjado más
las eventuales sobrecargas de construcción, ello exige
la disposición de sopandas como apoyos provionales.
– Forjados con piezas en losas alveolares y hormigón
“in situ” y otras soluciones. |